*** El vicerrector Efrén
Pérez Nácar señaló que estudiantes, profesores, administrativos, técnicos y
obreros son, de forma reiterada, víctimas del hampa dentro y fuera de la
universidad
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| El trayecto Control 100-La Concepción permanece azotado por ladrones; comunidad universitaria aboga seguridad (Foto: Archivo / Alfredo Zambrano) |
PRENSA
ULA-NURR / Gilcely Linares (CNP 15.221) Las adyacencias de la
Villa Universitaria, sede central del Núcleo Universitario “Rafael Rangel”
(NURR), continúan siendo blancos de la inseguridad.
Prácticamente a diario se
registran robos, a estudiantes, profesores, así como al personal
administrativo, técnico y obrero, en el trayecto La Concepción-Control 100; los
malhechores utilizan múltiples modos operandi, entre ellos andar en moto para
escapar de forma rápida hasta simular ser peatones, personas en busca de
direcciones, pasajeros comunes o trabajadores que retiran maleza.
El vicerrector Efrén
Pérez Nácar expresó que la situación causa honda preocupación y menoscaba la
seguridad e integridad física de los universitarios, por ello, emplaza a las
autoridades competentes a instalar mecanismos de control, sin alterar la
autonomía universitaria.
“El gobierno no ha
atendido el tema de la inseguridad, parece que estuviera a espaldas a los
universitarios. Una vez más solicitamos sean colocados puntos de vigilancia y
seguridad cerca de la Villa Universitaria, no de control de flujo vehicular
como ha ocurrido en anteriores oportunidades”, dijo. En tal sentido, las
autoridades vicerrectorales están prestas a establecer planes de seguridad con
las Fuerzas Armadas Policiales del estado Trujillo (Fapet), la Dirección de
Seguridad Ciudadana, adscrita a la Gobernación, entre otras instancias, para
salvaguardar a los ulandinos.
Casos
recientes
Durante las últimas
semanas, tres son los casos de inseguridad más sonados en el NURR. El primero
ocurrió en las propias instalaciones universitarias al mediodía del 10 de
abril, en un pasillo cercano a la Sala de Cine “José Ignacio Cabrujas”, cuando
bajo amenazas con armas blancas, unos cinco sujetos, despojaron a un grupo de
estudiantes de teléfonos inteligentes y computadoras portátiles.
El hecho desencadenó una
persecución, logrando el Personal de Vigilancia detener uno de los elementos,
quien, en medio de los ánimos caldeados recibió, por parte de un grupo de
alumnos, golpes con la fuerza física y objetos contundentes, incluso antes de
entregarlo al Cuerpo de Investigaciones Penales y Criminalísticas (Cicpc), lo
desnudaron. Ese día, la masa estudiantil advirtió que quienes osen robar,
atracar y/o hurtar en la universidad recibirán el mismo trato, sin embargo, las
autoridades rangelianas rechazaron la generación de mayor violencia.
Mientras que el 31 de
mayo, a pocos metros de la Y, hacia La Concepción, dos sujetos, que fingían ser
obreros al asear un matorral, robaron y amenazaron a varios bachilleres, les
llevaron celulares, morrales, cuadernos, libros hasta los zapatos. También, la
comunidad universitaria no está exenta de la inseguridad en las paradas y
unidades del transporte público.
El suceso más reciente, ocurrió el martes 5 de junio, en horas de la tarde, cuando malhechores atracaron a dos estudiantes cerca de la parte externa del Comedor, siendo uno de ellos atrapados por los funcionarios policiales del municipio Pampanito, quienes lo entregaron a los jóvenes universitarios para trasladarlo hasta la Unidad de Vigilancia y luego intentaron "hacer justicia pos sus manos", al darle contundente una golpiza. Las autoridades vicerrectorales realizaron el procedimiento correspondiente para entregar el sujeto a efectivos del Cicpc e iniciar la investigación; asimismo, reiteraron rechazar la violencia en las instalaciones ulandinas.
El suceso más reciente, ocurrió el martes 5 de junio, en horas de la tarde, cuando malhechores atracaron a dos estudiantes cerca de la parte externa del Comedor, siendo uno de ellos atrapados por los funcionarios policiales del municipio Pampanito, quienes lo entregaron a los jóvenes universitarios para trasladarlo hasta la Unidad de Vigilancia y luego intentaron "hacer justicia pos sus manos", al darle contundente una golpiza. Las autoridades vicerrectorales realizaron el procedimiento correspondiente para entregar el sujeto a efectivos del Cicpc e iniciar la investigación; asimismo, reiteraron rechazar la violencia en las instalaciones ulandinas.
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