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Tras declararse en desobediencia laboral, la Asamblea General Informativa de
Siprula decidió trabajar en dos bloques en el NURR, previendo la asistencia normal
a las dependencias universitarias los días miércoles. Igualmente los profesionales
y técnicos participarán en acciones pacíficas de calle
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| Por la situación país y universitaria, la directiva de Siprula se mantiene en sesión permanente Foto: Carlos Cegarra) |
PRENSA
ULA-NURR / Gilcely Linares (CNP 15.221)
Ante la constante violación de derechos socioeconómicos e irrespeto a las
garantías constitucionales, los agremiados del Sindicato de Profesionales y
Técnicos de la Universidad de los Andes (Siprula) se declaran en desobediencia
laboral. En tal sentido, acordaron trabajar por bloques en el Núcleo Universitario
“Rafael Rangel” (NURR), bajo un esquema denominado Horario Humanitario por
Hambre, consiste en laborar los lunes y martes, el Grupo A, mientras que los jueves y viernes, el Grupo B.
No obstante, los días miércoles todos
los afiliados deberán cumplir sus habituales jornadas. La decisión fue tomada durante una Asamblea
General Informativa realizada este 28 de enero en uno de los Laboratorios de
Computación, del Edificio F, de la Villa Universitaria, presidida por Dionis
Dávila, secretario general de Siprula, conjuntamente con Miguel Fernández, Luis
Miguel Cañizalez, Ana Isabel Cifuentes e Ygnacio Lima, directivos gremiales en
el Núcleo Trujillo, quienes enfatizaron que la medida ya entró en vigencia y por
ahora tendrá un lapso de 30 días, lo cual servirá para evaluar resultados,
darle continuidad o aplicar correctivos.
En las dependencias donde sea
imposible aplicar la acción de protesta, debido a la carga de trabajo u otras
excepciones, emplazan al personal conciliar convenios con los jefes inmediatos,
pero de haber objeción solicitar el apoyo gremial. Dávila expuso que Siprula se
mantiene en sesión permanente, además advirtió que frente a la activación del
Horario Humanitario por Hambre no se plegarán a paros nacionales porque cada
profesional y técnico universitario estaría dejando de laborar dos días cada
semana.
También acordaron sumarse a todas las
propuestas constitucionales emitidas por la Asamblea Nacional en busca de un
cambio político; al mismo tiempo de participar en pancartazos, marchas,
caminatas, entre otras actividades pacíficas de calle.
Visión
universitaria
A propósito de su visita al NURR, Dávila
insistió que los salarios de los universitarios no cubren las necesidades básicas,
ni siquiera las relacionadas con la alimentación diaria, siendo una situación
preocupante por las consecuencias familiares e individuales que podrían
acarrear. Aunado a ello, emplazó a luchar por mantener abierta la casa que
vence las sombras, jamás abandonar los espacios del conocimiento y asumir el
férreo compromiso de contribuir en la reconstrucción nacional.
Gilberto Rosales, jefe encargado de
la Unidad de Mantenimiento, señaló que ante la actual coyuntura, a los
universitarios les corresponde dar la batalla, bregar por un futuro prospero
con hechos, no solo en palabras o pronunciamientos en las redes sociales. Cónsono
al planteamiento anterior, Adriana Uzcátegui, adjunta del Programa “Fray Juan
Ramos de Lora”, instó a salir de la zona de confort, es decir, emprender
acciones legales con firmeza porque de lo contrario la universidad entrará en
un colapso total.
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| Profesionales y técnicos de la ULA-NURR respaldan despliegue de acciones pacíficas y constitucionales (Foto: Carlos Cegarra) |
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