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Los sueldos percibidos no les alcanzan a los universitarios para comer ni
asistir diariamente a los espacios de trabajo. Además, según declaraciones de
sindicalistas, el personal de aseo no cuenta con materiales e insumos esenciales
para limpiar
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| Aseadoras, obreros, jardineros, vigilantes y choferes del NURR reclaman salarios dignos (Foto: Carlos Cegarra) |
PRENSA
ULA-NURR / Gilcely Linares (CNP 15.221) Migravis
Betancourt y Alexis Lozano, directivos del Sindicato de Obreros de la
Universidad de Los Andes (Soula), seccional Trujillo, advierten que “es
imposible ocultar una realidad, es decir, que por más que se quiera cumplir con
las funciones asignadas no existen condiciones básicas o mínimas para laborar
en la actualidad en el Núcleo Universitario Rafael Rangel (NURR)”.
El gremio afirma que sus afiliados,
entre ellos aseadoras, obreros, jardineros, vigilantes más los choferes están
de “brazos caídos” porque la institución, aunque haga las gestiones e intentos
necesarios, por sí sola no puede suministrar los materiales e insumos
requeridos para trabajar.
Como ejemplo los declarantes
expresan que apenas en febrero las aseadoras recibieron 18 litros de cloro para
limpiar la Villa Universitaria, el Centro de Atención Médico Integral de la
Universidad de Los Andes (Camiula) y la Casa Carmona “Antonio Luis Cárdenas”,
mientras que la dotación vigente también es deficiente.
“Con la nueva dotación apenas es
posible cubrir uno o dos días de jornada laboral, cuando la universidad amerita
de una limpieza extensa; 150 litros de cloro jabonoso, 12 cepillos, 26 coletos,
10 litros de gasolina y 10 cambios de nailon son insuficientes”, recalca
Betancourt.
Preocupación
gremial
Sobre la posible reactivación de la
Ruta Universitaria, debido a la donación de una batería por sectores
estudiantiles, el jefe de Transporte del NURR, Francisco Téllez, considera que
“debe haber una revisión exhaustiva de la unidad 184, garante de sincerar la
operatividad en general, pues lleva meses fuera de servicio y para colmo antes
de interrumpirse los traslados ya presentaba averías mecánicas y era evidente
el deterioro de los cauchos”.
Téllez, al igual que un grupo de
choferes, señalan que han comunicado la situación a las autoridades
vicerrectorales, presididas por Geovanny Castellanos, por lo que esperan que
sus consideraciones sean tomadas en cuenta.
Mantienen
acciones de protesta
Los sindicalistas insisten en que
el gremio conjuntamente con sus afiliados “tienen sentido de pertenencia, desean
trabajar como antes, sin embargo ni el salario alcanza para asistir cinco días
a la semana al recinto universitario menos para comer dignamente o cubrir otros
gastos esenciales”.
En tal sentido, indican que Soula
Trujillo mantendrá, de acuerdo a lo convenido en Asambleas, sus acciones
pacíficas de protesta y aplicando bloques de trabajo sin dejar solos espacios
claves en la institución.
pero que verga
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