*Discurso del bachiller Rodolfo Paredes, presidente del Centro de
Estudiantes del Nurr (Cenurr), durante la sesión especial por el Día del
Estudiante Universitario realizada el 30 de noviembre de 2022 en la Cámara
Municipal de Rafael Rangel*
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(Foto: Cortesía / Cenurr)
LICENCIADO OSWALDO
PUCHE,
PRESIDENTE DEL CÁMARA MUNICIPAL DE
RAFAEL RANGEL Y DEMAS DISTINGUIDOS MIEMBROS:
Manifestamos nuestro agradecimiento por el honroso deber de ser
designado como el Orador de Orden en
esta Sesión Especial con motivo del Día de Estudiante Universitario en Venezuela. Hablar del movimiento estudiantil venezolano
es hablar de una fuerza irreverente que ha puesto sus mejores intenciones en cada proceso
político en el país.
“Madre, si me matan, ábreme la herida, ciérrame los ojos y tráeme
un pobre hombre de algún pobre pueblo
y esa mano por la que me matan, pónmela en la herida por la que muero”.
Andrés Eloy
Los rapsodas de la Grecia Inmortal, al comenzar sus cantos, invocaban a los dioses del Olimpo, para que estos infundieran la inspiración en sus corazones; de esa manera, nosotros iniciamos esta intervención junto al pueblo rangeliano, con las palabras del poeta del pueblo venezolano, que expresan la sensibilidad y compromiso de una generación por superar los problemas que sufría una Venezuela polvorienta, palúdica, rural y estancada por la barbarie. Una generación, que inventó a la sociedad civil en este país, como lo afirmaba el historiador Manuel Caballero, y que, se convirtió en un referente para todos los movimientos juveniles que vendrían después. Hoy el movimiento estudiantil venezolano en un contexto inédito en nuestra historia, debe seguir hacia adelante bajo el signo de la esperanza y de la acción, y por supuesto, con la inspiración que nos regalan los dioses.
Ahora, ¿Por qué se conmemora el Día del Estudiante en Venezuela? Hacía el año de 1957, en el país recorría subterráneamente un descontento popular contra el régimen dictatorial de Marcos Pérez Jiménez, y en ese sentido, un movimiento libertario. Volantes con la consigna: “No continuismo. Elecciones libres. Muera Pérez Jiménez”, recorrían clandestinamente las casas, calles, liceos y fábricas. La Junta Patriótica construía la “unidad” para reconquistar la democracia perdida con el derrocamiento del maestro Rómulo Gallegos, sus miembros; Acción Democrática, Copei, URD, el Partido Comunista y algunos sectores del ejército, dejaban a un lado sus fundamentos programáticos para poder avanzar. Entonces, se preparaba la huelga estudiantil y la conspiración militar. La primera, sería el detonante y la caja de resonancia de los conflictos contenidos por el terror que generaba la dictadura. El 21 de noviembre de 1957, el Frente Universitario había decidido emprender la huelga. Días antes algunos liceos, entre ellos; Fermín Toro, Andrés Bello, Juan Vicente González de Caracas, calentaban las calles, esto, como respuesta al llamado a plebiscito que anunciara el dictador para el 15 de diciembre de ese año. Los estudiantes de derecho, de medicina y otras disciplinas decidieron romper el silencio y aprovechar el Congreso de Cardiología que reunía a especialistas de América Latina y el mundo que se celebraba en el Aula Magna de la Universidad Central de Venezuela. Distintos focos de agitación en las facultades de la UCV fueron congregando a cientos de estudiantes y se dirigieron al Aula Magna para tomar el derecho de palabra y denunciar a la dictadura. De este modo, dicho congreso de cardiología servía como canal de información y de comunicación hacia el exterior del país. La huelga, como era de esperar, fue reprimida brutalmente por la Seguridad Nacional, con alrededor de doscientos estudiantes detenidos y algunos heridos, entre ellos dos agentes de la Seguridad Nacional. Efectivamente, este episodio fue un detonante esencial para el derrumbe de la dictadura. El atrevimiento estudiantil logró romper el silencio y burlar a la Seguridad Nacional, se convertía en el detonante de toda una gesta. Luego de la huelga, la crisis de Pérez Jiménez era más grande y el primero de enero del año 58, una intentona militar ponía en jaque al gobierno, y el 21 del mismo mes, una huelga general convocada por la Junta Patriótica terminó por desgastar la poca estabilidad que la dictadura mantenía y ya para el 23 de enero el dictador toma un avión, dejando atrás una década de terror.
Desde tiempos inmemorables los hombres han entendido que la
educación es un vehículo esencial
para el desarrollo de sus sociedades en el devenir del tiempo, eso no ha pasado
ni pasará de moda. Este derecho humano
y todos los demás, solo pueden ser satisfechos por la democracia. Los
regímenes no democráticos desprecian
cualquier manifestación de arte o cultura que invite a la emancipación, son precisamente
enemigos de la educación, son enemigos de la democracia, son enemigos de los pueblos.
¿Cómo invitar a la paz si las universidades se caen a pedazos? ¿Si los profesores se mueren de hambre? ¿Si los estudiantes abandonan las aulas?
No basta con que un joven acceda a una universidad, deben existir
condiciones estructurales que
garanticen que va permanecer allí y que luego será un talento humano
crucial para prosperidad de la nación,
porque la prosperidad si garantiza la paz y la autodeterminación de los pueblos,
no la miseria.
Lamentablemente la realidad del estudiantado en Trujillo y en
Venezuela, no es digna del siglo
XXI; sin transporte, sin pasaje estudiantil,
sin becas acordes a las
necesidades de los compañeros de escasos recursos (que son bastantes hoy en día), así como también, convivir
en ambientes académicos con infraestructuras
deterioradas por la falta de inversión que generan los bajos presupuestos, la baja conexión de la
universidad con el mercado laboral y los innumerables
ataques a la Autonomía y a la Libertad Académica. Simplemente a los universitarios se le han violentado
sus derechos humanos en los últimos tiempos
por el hecho de defender y promover un espacio democrático, por eso, este movimiento estudiantil debe tener
claro la responsabilidad del momento histórico y saber defender
sus derechos ante la infamia.
Es nuestra responsabilidad con la historia, con la universidad y con el país.
Como representante institucional electo en el área estudiantil del Núcleo Universitario Rafael Rangel de la ULA, tengo el deber defender y promover la excelencia. El NURR en el año de su aniversario 50 reúne un cumulo de grandiosidades puesto al servicio de los trujillanos; de entrada es la casa de educación superior más antigua y la única universidad autónoma, siendo esta entonces, la matriz de la educación en el estado, asumiendo una amplia labor formadora de talento humano, una tarea de difusión de la cultura, una función de la enseñanza superior, una labor promotora de la investigación a los más altos niveles. Hoy, como lo afirma nuestro cronista institucional, el profesor Alí Media Machado: “A pesar que el destino se ha vestido de canalla, puede verse que el Núcleo “Rafael Rangel” de la Ilustre Universidad de Los Andes, es el más grande patrimonio del estado Trujillo en toda su historia, innegablemente”. Conseguir esta importante institución no fue fácil, pero se logró la universidad para Trujillo, tarea gigantesca que se materializó entre los años 1971 y 1972, con la presencia de un pueblo consagrado en el recinto del Aula Magna de la ULA, en la ciudad de Mérida, que quedó sorprendida ante una caravana cívica de trujillanos que fueron para pedir una extensión de la Universidad para sus hijos.
Sin duda, la gran reivindicación de la juventud trujillana está nuevamente a merced de nuestro éxito como institución y nuestra acción como sociedad organizada, pero solo si esta casa del saber es inequívocamente Autónoma como lo establece la Constitución en su artículo 109 y como aparece en los 16 Principios Interamericanos sobre Libertad Académica y Autonomía Universitaria de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de nuestro sistema regional de protección, antecedente, que apunta al Sistema Universal. Siendo entonces el Núcleo la única Universidad Autónoma en el estado Trujillo, su grandiosidad debe ser comprendida, no solo por su comunidad universitaria, sino por todos los trujillanos que amen esta tierra. La Autonomía es nuestra garantía para disfrutar de la Libertad Académica, la cual tiene relación con el derecho a la educación, que es un derecho humano y un bien público de carácter social. Particularmente el derecho a la educación está contemplado en el artículo 26 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, en los artículos 13 y 15 del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (PIDESC) y en la Observación General Nº 13 sobre el derecho a la educación en el PIDESC, elaborada por el Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de las Naciones Unidas (CDESC). El derecho a recibir educación, permiten al individuo el aprendizaje de conocimientos, su desarrollo personal y profesional, haciendo de esta manera efectivos otros derechos humanos, tales como: alcanzar un nivel de vida adecuado, incrementar su participación ciudadana, o mejorar la salud. Asimismo, el Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de las Naciones Unidas (CDESC) establece que la educación desempeña un papel decisivo en la emancipación de la mujer, la protección de los niños contra la explotación laboral, el trabajo peligroso y la explotación sexual, la promoción de los derechos humanos y la democracia, la protección del medio ambiente y el control del crecimiento demográfico. De este modo, la relación entre la educación y la libertad académica es complementaria, porque esta última permite el goce y ejercicio del derecho a la educación.
También existe una relación entre libertad académica y libertad de expresión, y se verifica en la necesidad de la búsqueda de información que resulta inherente a la actividad investigativa académica, así como en la necesidad de difundir el conocimiento científico producido por la investigación del profesor, el investigador o estudiante. Tal como lo reconoce el artículo 19 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos: nadie podrá ser molestado a causa de sus opiniones. Toda persona tiene derecho a la libertad de expresión este derecho comprende la libertad de buscar, recibir y difundir informaciones e ideas de toda índole, sin consideración de fronteras, ya sea oralmente, por escrito o en forma impresa o artística, o por cualquier otro procedimiento de su elección.
¿Cuándo se vulnera la libertad académica? La libertad académica
cuenta con los principios y características generales de los derechos y libertades inherentes al ser humano.
Cualquier acto de amenaza que les inhiba a profesores e investigadores seguir investigando y/o difundiendo el conocimiento
científico, vulnera la libertad académica, como se presenta el siguiente caso sacado:
Una profesora de la Facultad de Medicina de La Universidad del
Zulia condujo una investigación microbiológica, donde encontró
evidencia sobre la responsabilidad
del Estado en relación a problemas graves de salud pública en la ciudad de Maracaibo, por lo que la Directiva
del Hospital donde adicionalmente
trabajaba a cargo de la sección de microbiología, le prohibió divulgar los resultados de su investigación.
Sin lugar a dudas, la situación representa
una violación de la libertad académica, entre otros derechos, como la libertad de expresión. La libertad
académica implica protección no solo en el espacio
dentro de la universidad, sino en el entorno de desarrollo del profesor- investigador. En ese marco la propuesta
que queremos hacer pública es, primero;
que todas las universidades sean Autónomas y segundo; que en todas las carreras el estudio de la Libertad
Académica y la Autonomía Universitaria sea parte del pensum
de estudio.
La más grande reivindicación de la juventud trujillana, que hoy
necesita de espacios para su
desarrollo, la empresa más grande, el pilar más fuerte, el de mayor envergadura, el Núcleo Universitario “Rafael Rangel”, necesita
de nuestras manos agradecidas
para retribuirle un poco de lo que nos ha dado. Aprovechamos el escenario para invitar a los rangelianos a
formar parte y a tomar partida,
en la recuperación de la universidad de los trujillanos, es momento de darle
una mano al NURR, que hoy sigue en sus 50 años, firme y presente.
He dicho.
Bibliografía:
Libertad académica y autonomía universitaria: una mirada desde los
Derechos Humanos. Referencias a Venezuela (2010-2019).
(Foto: Cortesía / Cenurr)
(Foto: Cortesía / Cenurr)
(Foto: Cortesía / Cenurr)
(Foto: Cortesía / Cenurr)
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